Sobre un mundo basado en recursos, en lugar de basado en dinero.
Viendo la parte 2 de Zeitgeist http://www.zeitgeistmovie.com/ (que me parecio mas aburrida que la pat 1, dicho sea de paso) me quede con una sola idea importante: El concepto de pasar de un mundo basado en dinero a uno basado en recursos.
Esto lo plantea un par de locos del llamado Proyecto Venus http://www.thevenusproject.com/
Hasta aquí nada demasiado relevante. Lo que si me gusto mucho, es un ejemplo que da este señor donde dice "At the beginning of World War II, the U.S. had about 600 first-class fighting aircraft. We rapidly overcame this short-supply by turning out over 90,000 planes per year. The question at the start of World War II was: Do we have enough funds to produce the required implements of war? The answer was No, we did not have enough money or gold, but we did have more than enough resources."
Por otro lado, mi hermano me regalo un libro llamado "Tiempos Líquidos" de un tal ZYGMUNT BAUMAN. Si bien aun no lo leí, casualmente me crucé con una entrevista a esta persona en la revista ñ http://www.revistaenie.clarin.com/notas/2009/07/18/_-01960446.htm
Lo interesante que plantea este señor al final de la entrevista es que este modelo capitalista actual de modelo basado en prestamos ha demostrado una gran falla en la actual crisis, y lo que más lo preocupa a este señor es que en lugar de modificarlo para evitar que vuelva a suceder otra crisis como esa, se esta optando por ponerlo nuevamente en funcionamiento regalandole plata a los bancos para que la rueda vuelva a girar. El motor se rompió por un mal diseño, y en lugar de corregir el diseño se repara el mismo modelo. Al menos eso es lo que entendí de la entrevista de Bauman.
Ahora, juntando los dos conceptos (el de la producción de aviones en la segunda guerra mundial con el regalarle plata a los bancos para salvarlos) me da la sensación de que la forma correcta de migrar con la menor disrrupción posible de un mundo basado en dinero a uno basado en recursos (que al día de hoy parecieran ser más que suficientes para alimentar a todos los habitantes) es controladamente, empezar a emitir para salvar a los bancos y generar puestos de trabajo. Como dijo Paul Samuelson, si bien tiene que existir un prestamista de última instancia, también tiene que existir un consumidor de última instancia.
Si conseguimos que los gobiernos emitan dinero constantemente a una tasa que deje la inflación a menos del 10% anual, se puede usar esa plata para darle trabajo a todas las personas y garantizarles así el acceso a los recursos (que al día de hoy parecen ser suficientes) necesarios para una vida "feliz". De esta forma se logra un comienzo de asistencia, dejando intacto el premio al esfuerzo del modelo capitalista.
Como corolario de lo anterior, si se emite a un ritmo que genera 10% de inflación anual, el ahorro en dinero deja ser atractivo, forzando a migrar a un ahorro en bienes de producción. No sirve ahorra en bienes en sí mismo, porque al mantener un aumento del nivel de producción los bienes pierden valor constantemente, al menos que sean de colección. De hecho inclusive invertir en maquinas de producción debe hacerse con un ROI en mente que permita ganar dinero antes de que la maquina quede obsoleta.
Como alternativa extrema, me parece mejor invertir en un fideicomiso de producción agropecuaria que sea dueño de sus tierras, ya que estas son lo único no reemplazable por nuevas y mejoradas versiones.
Para cerrar, no nos olvidemos que si bien los recursos que poseemos nos permiten producir todo lo que queramos en cuanto a cantidad, en único recurso sobre el que no tenemos control es el tiempo, y que necesariamente transforma en escasos otros recursos.
Friday, July 31, 2009
Algo distinto encara la muy nueva editorial La Bestia Equilátera en su colección Jataka de cuentos budistas para lectores a partir de los 8 años. "En realidad -acepta Javiera Gutiérrez, su editora-, esa edad es el punto de partida, porque nuestra intención es que sea un libro para toda la vida. El toro amable, por ejemplo, que tiene como protagonista a Buda, quizá sólo termine de entenderse a una edad muy avanzada, pero siempre le está contando algo a su lector, cualquiera sea su edad."
En el caso de Arte a Babor, una muy joven editorial que crece bajo el ala protectora del programa Incuba del Centro Metropolitano de Diseño del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, su directora, la arquitecta y diseñadora gráfica Silvia Sirkis, busca aunar texto e imagen para "descubrir el arte desde chicos". Con bocas de expendio novedosas (las jugueterías didácticas), Silvia ha logrado despertar el entusiasmo de padres e hijos agradecidos, que le mandan mails con devoluciones acerca de sus textos que proponen misterios (El misterio de la bailarina, un robo en el Museo Nacional de Bellas Artes) o una biografía de un pintor famoso, desde su niñez (A Benito le gustan los barcos, sobre Quinquela Martín, con ilustraciones de Tomi Hadida). "En Buenos Aires hay un gran movimiento cultural y en arte, particularmente, hay una gran creatividad dirigida a los adultos, pero no hay arte para chicos y mucho menos libros para chicos, que además busquen despertar el interés para después ir a ver la obra. La mirada local es muy importante, y la forma elegida, el cuento, es la que mejor permite este acercamiento."
En el caso de Arte a Babor, una muy joven editorial que crece bajo el ala protectora del programa Incuba del Centro Metropolitano de Diseño del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, su directora, la arquitecta y diseñadora gráfica Silvia Sirkis, busca aunar texto e imagen para "descubrir el arte desde chicos". Con bocas de expendio novedosas (las jugueterías didácticas), Silvia ha logrado despertar el entusiasmo de padres e hijos agradecidos, que le mandan mails con devoluciones acerca de sus textos que proponen misterios (El misterio de la bailarina, un robo en el Museo Nacional de Bellas Artes) o una biografía de un pintor famoso, desde su niñez (A Benito le gustan los barcos, sobre Quinquela Martín, con ilustraciones de Tomi Hadida). "En Buenos Aires hay un gran movimiento cultural y en arte, particularmente, hay una gran creatividad dirigida a los adultos, pero no hay arte para chicos y mucho menos libros para chicos, que además busquen despertar el interés para después ir a ver la obra. La mirada local es muy importante, y la forma elegida, el cuento, es la que mejor permite este acercamiento."
Subscribe to:
Posts (Atom)